Una parte importante de la gestión de inventarios de una pequeña empresa es una organización adecuada de su almacén, especialmente si tiene una pequeña empresa en el comercio minorista. Esto es fácil de entender, ya que la mayor parte de las operaciones relativas a su inventario se realizan en el almacén, y es aquí donde se guardan las unidades de stock.
Sin embargo, algunos propietarios de negocios siguen teniendo algunas malas prácticas, ya sea porque no saben nada mejor, o tal vez porque piensan que su configuración actual es lo suficientemente buena. Pero los errores en el almacén pueden estar costándole mucho dinero. Estamos a punto de ver cómo, con nuestros consejos de gestión de inventario para pequeñas empresas para mejorar su almacén.
1. Maximizar el espacio vertical
Cuando se gestiona un almacén, una de las cosas más importantes en la gestión de inventarios de una pequeña empresa es tener espacio libre. Un error común es tener el espacio justo para acomodar todas sus existencias. Esto hace que reorganizar y auditar el almacén sea una tarea muy difícil porque todo está muy apretado. Además, le pone en apuros en caso de que el negocio crezca en el futuro.
Teniendo esto en cuenta, otro error que cometen algunos propietarios es comprar estanterías relativamente bajas y llenar todo el almacén con ellas, pensando que es más que suficiente para las necesidades futuras. Pero si el negocio se dispara, vuelves a tener problemas. Incluso si decides sustituir las estanterías en ese momento, será una pesadilla trasladar todos los paquetes a otro lugar para poder realizar la remodelación.
La mejor solución, pues, es comprar desde el principio la estantería más alta posible. Incluso si no puedes permitirte, o no quieres instalarla en todo el espacio, puedes añadir fácilmente más unidades más adelante. Pero a fin de cuentas, cuanto más espacio tengas, mejor, y el espacio vertical es tan bueno como el horizontal.
2. Encuentre una manera de deshacerse de los artículos viejos
Esta es una parte importante de la gestión del inventario de la pequeña empresa y por varias razones. En primer lugar, si tienes un negocio en el que vendes productos perecederos, deberías utilizar un enfoque FIFO, y no deberías tener artículos viejos en primer lugar, aunque puede ocurrir.
Si no vende productos perecederos, tal vez los artículos antiguos hayan sido sustituidos por una versión más reciente. Tal vez se dedique al negocio de la ropa y un artículo específico haya pasado de moda, o tal vez se dedique al campo de la electrónica y un determinado equipo haya dado paso a un modelo más nuevo.
Sea cual sea el caso, no tienes muchas posibilidades de vender este tipo de artículos, al menos no a su precio original. Mientras tanto, está perdiendo dinero, no sólo el dinero que invirtió en primer lugar, sino porque estas unidades están ocupando un espacio precioso en el almacén.
La primera solución es vender estos artículos a un precio rebajado. Puedes ser generoso con él, dependiendo de la antigüedad de los artículos, pero lo importante es vaciar el almacén. Si el descuento no funciona o no es una opción, regalar a la beneficencia puede ser una buena alternativa. No sólo consigues liberar espacio, sino que mejoras la imagen de tu empresa o de tu marca como una que se preocupa por el bienestar de las personas.
3. Tenga un área para notas/sugerencias
En la gestión de inventarios de una pequeña empresa, es primordial que las operaciones se desarrollen sin problemas en su almacén. Pero la mayoría de las veces, los empleados acuden allí con prisas porque los clientes están esperando en la entrada, especialmente en el comercio minorista. Así que, aunque su personal se dé cuenta de que algunas cosas faltan, acaban olvidándose de ello debido a que tienen prisa todo el tiempo.
Una cosa original que puedes poner en práctica es instalar una gran pizarra blanca o negra cerca de la salida del almacén. Puede que la pizarra no sea tan apropiada, por el desorden que crea la tiza, pero eso depende de tu negocio.
De este modo, cada vez que tus empleados se den cuenta de que hay un problema, podrán anotarlo rápidamente cuando salgan del almacén. De este modo, no se pierde ninguna información. A continuación, puedes celebrar una reunión de personal al final del día o de la semana para debatir estos problemas con más detalle y ver qué se puede hacer para mejorar.